El problema de la humedad en las paredes, techos, suelos y ambiente dentro del hogar es muy frecuente sobre todo en las estaciones que parecen asociarse con el agua, pero sus consecuencias no se limitan a dichas épocas, sino que se instalan, permanecen y se expanden causando graves daños materiales al edificio y a la salud .
Existen diferentes tipos de problemas de humedad dependiendo del canal que utiliza (el agua) para llegar a causar este fenómeno:
- Capilaridad: Se produce cuando el agua sube desde el suelo atravezando los cimientos y muros provocando el desprendimiento de la corteza de sus paredes. En este caso la humedad puede provenir de aguas subterráneas naturales, accidentales (estanques o piscinas en malas condiciones) o artificiales como cañerías rotas o pasos de desagües cercanos.
- Condensación: Los edificios con mucho aislamíento térmíco, suelen derivar problemas de condensación ya que la misma solución a la salida o entrada de las temperaturas extremas dificulta la circulación de los vapores producidos en casa por los electrodomésticos como lavadoras, agua caliente en duchas y grifos, cocinas, etc. por lo que todo el vapor producido en el interior se condensa produciendo este fenómeno que se experimenta con la sensación de humedad en el ambiente, malos olores en el ambiente, armarios y trasteros; vaho en los cristales, moho en las paredes , suelos, etc.
-Filtración: Este tipo de humedad es causada por la presencia de tierra al nivel de las paredes, como ocurre en los sótanos, sub suelos, garajes situados por debajo del nivel del suelo. La humedad atravieza entonces las paredes provocando daños.
Sales higroscópicas: La humedad ascendente transporta sales minerales contenidas en la tierra y el agua (salitre), esto contamina el revestimiento de las paredes y captan la humedad ambiental provocando la caída de la pintura.
Goteras: El agua penetra en las casas como consecuencia de averías en las cañerías y/o techos, plataformas perforadas, grietas en el tejado etc.
